Aspectos Clave

El mes de julio fue en general un mes positivo para los índices de renta variable y renta fija. El sentimiento de mercado pasó de “risk-off” a “risk-on”, con bolsas globales cerrando su mejor semana desde noviembre 2022; la vuelta a la modalidad “cuanto peor mejor” (indicadores macro), señales de moderación en las presiones inflacionistas, el mercado apuntando a un final cada vez más cercano en el ciclo alcista de tipos y el inicio de la campaña de resultados del segundo trimestre, fueron algunas de las fuerzas detrás del impulso ganado durante el mes.

El primer semestre de 2023 cerró con rentabilidades dispares para los índices de renta variable. El fuerte incremento de la concentración en USA (S&P-500 tiene el 27,73% de su peso en 7 valores) y la rentabilidad centrada en la tecnología de elevada capitalización han sido algunos de los factores detrás de dichos diferenciales. Por otro lado, los mercados de renta fija también presentan divergencias importantes en rentabilidad, la cual es inversamente proporcional a la duración analizada y donde la calidad continúa pagando más que el riesgo de crédito.

Con la publicación de las Actas de la FED, su primera comunicación después del denominado “hawkish-pause” de junio; algunos miembros del comité se mostraron contrarios a la pausa en las medidas restrictivas y la mayoría opto por posicionarse a favor de 2 subidas adicionales en 2023. Adicionalmente, múltiples indicadores adelantados han dejado patente que el mundo se encuentra en zona de contracción. El PMI de Estados Unidos se encuentra por debajo de los 50 puntos, el ISM acumula 8 meses consecutivos en números rojos. En Europa, el PMI compuesto se localiza en 48,90, siendo el menor nivel en 6 meses. Sin embargo, los datos de empleo en Estados Unidos muestran resiliencia; la publicación del dato ADP quedó muy por encima de lo esperado; así mismo, la cifra de aumento de salarios subió más que el pronóstico (+4,40% vs- +4,20%). En China, el crecimiento del PIB es menor del previsto (6,30% interanual vs. 7,10%) y es evidente que la economía china necesitará de estímulos fiscales para atender su problema de crecimiento en muy corto plazo.

A pesar del pesimismo en el entorno macroeconómico, la publicación de los datos de inflación de junio en Estados Unidos fue favorable, situando el dato general en +3,00% (el nivel más bajo desde abril de 2021), cayendo desde +4,00% anterior. En su mayoría, dicho retroceso se debe a la caída de precios de la energía -16,50% interanual. La inflación subyacente retrocede al +4,80% desde el +5,30% anterior, alentado por el lado de los precios en el sector inmobiliario. En la Eurozona, el dato final del IPC de junio ratifica el freno de la inflación hasta un avance del +5,5% interanual desde el +6,10% anterior. Por otro lado, la inflación subyacente generó noticias menos alentadoras y la tasa repuntó dos décimas en junio hasta un crecimiento del +5,5% interanual y situándose así en los mismos niveles que la tasa general.

Con dichos resultados, las divergencias entre los mercados de renta variable americana y europea quedan momentáneamente cerradas. Por otro lado, los mercados de renta fija vuelven a recuperar dinamismo y actividad; la curva americana ha reconocido dichos retrocesos en términos inflacionarios y ha registrado fuertes caídas en los tipos a 2 años (-20 pbs); por otro lado, el tramo a 10 años también experimentó una caída paralela de -20 pbs.

Finalmente, tanto la FED como el BCE celebraron sus reuniones de política monetaria y cumplieron con las expectativas del mercado; aumentando en +25 pbs. los tipos de interés de referencia tanto en Estados Unidos como en Europa, situando la horquilla americana en 5,25% – 5,50% y dejando el tipo de interés de la Eurozona en 4,25%.

Informe Mensual de Mercados - Julio 2023