Aspectos Clave
El temor a un endurecimiento de las políticas monetarias de Fed y BCE repercutió en caídas significativas para acciones y bonos durante septiembre. El tensionamiento de los niveles de TIR aumentó el nerviosismo entre los inversores presionando así a las bolsas.
A nivel macro, la inflación en USA repuntó según lo previsto hasta situarse en el +3,7% desde el +3,2% anterior. El aumento viene explicado mayoritariamente por el componente energético. Por su parte, la inflación subyacente aceleró el rimo de contracción pasando a ubicarse en el +4,3% desde el +4,7% previo. En Europa, el IPC general y subyacente mejoraron de forma clara, cayendo hasta el +4,3% y 4,5% respectivamente.
En cuanto a Bancos Centrales, el BCE subió los tipos en +25pb llevando así el nivel de referencia hasta el 4,50% siendo este el nivel más elevado desde mayo de 2001. En un primer momento el mercado interpretó que este sería el nivel terminal de tipos para Europa. Sin embargo, las declaraciones de varios miembros del BCE a lo largo de todo el mes dejaron las puertas abiertas a nuevas subidas de tipos.
En Estados Unidos, la Fed mantuvo los tipos de interés sin cambios en el 5,5% tal y como estaba descontado. No obstante, el discurso posterior de Powell fue más agresivo de lo esperado y el posicionamiento del conjunto de miembros muestra una mayoría partidaria a una subida adicional en 2023. Ambos factores aceleraron las ventas en deuda y bolsas hasta el final de septiembre.
Multitud de miembros de la Fed realizaron comparecencias durante el mes mostrando un tono duro respecto a la política monetaria. Esto llevó a la TIR del 10Y USA a cotizar en el 4,686% en su máximo anual. También perjudicó a los bonos estadounidenses el continuo volumen de nueva deuda emitida que ha llegado a alcanzar un promedio de 5.000 millones diarios. Dicho volumen ha aumentado de forma clara desde el levantamiento del techo de deuda que tuvo lugar el pasado mes de junio.
El repunte de los precios del petróleo y el consecuente efecto de este sobre la inflación fue otro de los aspectos a destacar en el mes. La commodity llegó a cotizar en los 95,03$ por barril en su referencia WTI, aunque cerró el mes en los 90,79$ lo que implica una revalorización mensual del +7,44%.
El último generador de volatilidad lo encontramos en el posible cierre del Gobierno de Estados Unidos. Demócratas y Republicanos deben llegar a un acuerdo para aprobar el gasto presupuestario siendo la fecha límite el sábado 30 de septiembre. En caso de que las negociaciones no tengan éxito el funcionariado no indispensable de Estados Unidos cesará su actividad con el consecuente efecto negativo para la economía.