Aspectos Clave
La política monetaria de Europa y Estados Unidos se mantuvo invariable en abril ya que BCE y Fed no celebraron reuniones en el mes. A pesar de que las cifras de inflación siguieron acaparando la atención de los inversores, cada vez más voces se centran en la magnitud de una posible recesión en USA.
La inflación estadounidense registró una reducción significativa en abril situando la lectura interanual en el +5,0% respecto al +6,0% anterior. El dato además quedó por debajo de las estimaciones de los analistas haciendo que la mayoría de inversores descuenten que en mayo se dará la última subida de tipos por parte de la Fed. Lo anterior se vio reforzado por un muy buen dato de precios de producción, quedando en un +2,7% frente al +4,9% previo.
Encontramos el comportamiento opuesto en Reino Unido, dónde la inflación no consigue moderarse. La cifra de abril alcanzó el +10,1% cuando se esperaba un dato del +9,8%. La deuda del país experimento repuntes de rentabilidad notables dándose un efecto contagio al resto de las curvas europeas.
La publicación de las actas de la Fed dejó entrever que la institución se muestra preocupada por la posible recesión de la economía americana en el último tramo de 2023. La crisis de la banca regional norteamericana habría acrecentado el riesgo de experimentar contracciones en el PIB.
Las dudas sobre la banca regional de Estados Unidos se fueron disipando con el transcurso del mes. Esto desactivó a la renta fija como valor refugio lo que repercutió en alzas para las rentabilidades de las curvas gubernamentales, especialmente las de corto plazo. Durante las últimas jornadas de abril, la situación del First Republic Bank volvió a generar incertidumbre, aunque esta vez concentrada únicamente en dicha entidad.
En la última semana del mes se dio a conocer la cifra de PIB para Estados Unidos. El dato quedó notablemente por debajo de las estimaciones (+1,1% vs. +1,9% esperado y +2,6% anterior).
Durante el mes dio comienzo la campaña de resultados corporativos correspondiente al primer trimestre de 2023. Los analistas esperan que se den contracciones en las cifras de ventas y beneficios respecto al periodo anterior. Sin embargo, varias entidades han sorprendido con cifras al alza con la consecuente subida de su cotización. Destacan los números de algunas entidades financieras como JPMorgan y las de las grandes
empresas tecnológicas como Microsoft y Meta.
