Aspectos Clave

El último mes de 2022 se saldó con descensos significativos tanto para la renta variable como para la deuda.
La creciente preocupación por la recesión y un discurso muy agresivo por parte del BCE fueron los principales
catalizadores.

La inflación en USA descendió más de lo esperado por segundo mes consecutivo. La cifra quedó en el +7,1%
cuando se estimaba un +7,3% y confirma la tendencia bajista de los precios que en el mes anterior marcaron
un +7,7%. En dicha sesión las bolsas subieron con fuerza en un primer momento para luego retroceder hasta
ascensos más comedidos. La fuerte zona de resistencias técnicas en el entorno de los 4100 puntos para el
S&P500 ha supuesto un muro inquebrantable. Hasta 3 resistencias confluyen en dicha zona.

En Europa el escenario inflacionista es completamente diferente. El nivel de precios se situó en el +10,1% por
encima del +10,0% previsto. Destaca la fuerte distancia entre la inflación general y la subyacente (+10,1% vs.
+5,0%) poniendo de relieve la incidencia de la crisis energética en los precios europeos.

Los bancos centrales fueron protagonistas destacados en diciembre. La Fed subió tipos en 50pb llevando el
nivel de referencia hasta el 4,50%. Sorprendió la falta de concreción de Powell respecto a la futura evolución
de la inflación, empleo y crecimiento del PIB.

Por su parte, el BCE también elevó el precio del dinero en 50pb situando así el tipo de referencia en el 2,5%. El
posterior discurso de Lagarde activó una espiral de ventas tanto en acciones como en bonos. La Presidenta de
la institución europea afirmó que los tipos aún seguirían subiendo “mucho más” algo que el mercado no tenía
en sus previsiones, estimando un tipo terminal del 3,0% para la eurozona. Sorprendió además el hecho de que
un tercio de los miembros del BCE se hubiese mostrado cómodo con una subida de 75pb.

En diciembre prosiguió el notable nivel de inversión que muestran las curvas estadounidenses, especialmente
el spread entre los vencimientos de 2 a 10 años. Hay que remontarse hasta 1980 para encontrar una diferencia
tan abultada. En Alemania también se sigue dando el mismo fenómeno, aunque con menor intensidad. La
inversión de la curva de tipos es uno de los indicadores adelantados más fiables sobre futuras recesiones.

Destacó la completa ausencia del conocido como “rally de navidad”. Estacionalmente, las últimas sesiones de
diciembre suelen ser alcistas (una vez pasado el vencimiento trimestral de derivados). La cercanía de las
resistencias técnicas comentadas y el negativismo de los Bancos Centrales desalentaron a la toma de
posiciones por parte de los inversores.